Tecnología mejorada con IA predice eventos cardíacos fatales y no fatales a partir de una ACTC de rutina

Anualmente, más de 8 millones de personas en los Estados Unidos buscan atención médica de emergencia debido a dolor en el pecho. Por lo general, estos pacientes se someten a una angiografía coronaria por tomografía computarizada (ACTC) para detectar enfermedad de las arterias coronarias (EAC), que es causada por el estrechamiento u obstrucción de las arterias que suministran sangre al corazón. Sin embargo, no siempre se detecta un estrechamiento significativo durante la ACTC en muchos de estos casos. A pesar de ello, un cantidad considerable de estas personas sufren en los años siguientes ataques cardíacos mortales debido a placas pequeñas pero inflamadas que estallan. Ahora, se ha desarrollado una innovadora tecnología de inteligencia artificial (IA) que puede predecir eventos cardíacos fatales y no fatales. Esta predicción es independiente de las evaluaciones de riesgo clínico estándar y los resultados de la ACTC, y tiene el potencial de revolucionar la forma en que se trata la EAC al transformar la evaluación de riesgo y el manejo de los pacientes que se someten a ACTC de rutina.

La tecnología CaRi-Heart de Caristo Diagnostics (Oxford, Reino Unido) es una herramienta de imágenes impulsada por IA que evalúa la inflamación coronaria y caracteriza la placa, lo que ayuda a los médicos a tomar mejores decisiones para la atención del paciente. Este dispositivo médico de software como servicio (SaaS) basado en la nube utiliza IA para procesar imágenes de ACTC estándar. Introduce un biomarcador de imágenes único, el índice de atenuación de grasa (FAI, por sus siglas en inglés), para medir el grado de inflamación coronaria y proporciona un análisis detallado de las características de la placa que a menudo están relacionadas con ataques cardíacos.

El estudio ORFAN, el más grande de su tipo destinado a evaluar la eficacia de los biomarcadores de imágenes por TC para predecir resultados cardiovasculares a largo plazo, demostró que la inflamación coronaria medida por el CaRi-Heart FAI-Score de Caristo podía predecir eventos cardíacos fatales y no fatales. Estas predicciones se hicieron independientemente de los factores de riesgo rutinarios y de las interpretaciones estándar de la ACTC. En este estudio, CaRi-Heart Risk funcionó como el modelo "AI-Risk", que reclasificó alrededor del 30 % de los pacientes en categorías de mayor riesgo y alrededor del 10 % en categorías de menor riesgo. Cuando los médicos revisaron estos resultados, se produjeron cambios en el tratamiento de los pacientes en casi la mitad de los casos, atacando principalmente a una inflamación coronaria no reconocida previamente.

"Estamos entusiasmados de ver estos resultados clínicos excepcionales gracias a nuestra tecnología CaRi-Heart", afirmó Frank Cheng, director ejecutivo de Caristo Diagnostics. "Para erradicar las enfermedades cardíacas como la principal causa de muerte a nivel mundial, es importante que nos demos cuenta de que las personas pueden sufrir un ataque cardíaco poco después de una prueba de ACTC 'normal' que muestra una puntuación de calcio cero, sin placa y sin estenosis. La tecnología CaRi-Heart tiene el potencial de salvar millones de vidas en todo el mundo al mejorar la estratificación del riesgo de acuerdo con la medición de la inflamación coronaria basada en ACTC. Esperamos introducir nuestra tecnología en todas las geografías para transformar la atención cardíaca y hacer que los ataques cardíacos sean una realidad prevenible en todo el mundo".

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